Junto a la isla de Tarifa , al lado de la Punta Marroquí, descansan los restos de uno de los primeros buques de vapor que se echaron a la mar a principios del siglo XIX. Es conocido como el 'San Andrés', aunque en realidad se trata del 'Don Juan ', un buque inglés de la compañía P&O que chocó con un bajo rocoso el 15 de septiembre de 1837 . Este vapor mixto , que también podía navegar a vela, transportaba correo y pasaje entre Inglaterra y la península ibérica. En aquel septiembre de 1837 embarcó 25 toneladas de plomo y fruta en el puerto de Málaga y desde Gibraltar partió de regreso a Londres a pesar de la densa niebla. Era un viernes, a la una de la tarde, y las condiciones meteorológicas lejos de mejorar, empeoraron. La niebla se fue espesando y apenas dos horas después, sobre las tres menos cuarto, el buque chocó contra los escollos para acabar hundiéndose al cabo de unas horas. No hubo que lamentar ninguna baja y antes de que el barco desapareciera bajo las aguas con los lingotes de plomo y la carga de fruta, aún se pudieron rescatar algunas mercancías, el dinero que transportaba en efectivo y numerosos muebles.JM NIETODesde entonces el 'Don Juan' yace en el actual Parque Natural de Estrecho, a entre 24 y 33 metros de profundidad. El pecio, Bien de Interés Cultural, es visitable, aunque se requiere tener experiencia en buceo para contemplar sus restos. « Todo el yacimiento es impresionante », asegura Milagros Alzaga, que lo destaca de entre el resto de Andalucía que esta arqueóloga no ha excavado personalmente, tanto por la estructura del navío como por la abundante vida marina que alberga. «Si tuviera que elegir una zona específica, recomendaría detenerse en la sección de las palas », añade la jefa del Centro de Arqueología Subacuática (CAS) del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico , que estos días anda atareada con la limpieza y estudio del Delta I, un navío del XVII extraído recientemente del mar en Cádiz .El pasado bajo las aguas«Tarifa es un espacio con vestigios arqueológicos que abarcan desde la Prehistoria hasta la época contemporánea , y que posee una rica historia vinculada a la navegación desde la más remota antigüedad», constata Alzaga, para quien el 'Don Juan' «es un claro ejemplo» del pasado de este lugar emblemático para los amantes del buceo deportivo. «Es crucial visitarlo mediante un buceo responsable que respete tanto el patrimonio cultural como el entorno natural », subraya la arqueóloga subacuática, que invita a disfrutar del sitio tomando imágenes «pero sin tocar ni llevarnos nada, ni molestar ni dañar la vida marina que allí existe», para preservar este legado cultural y natural para las generaciones futuras.Un vapor mixto de principios del XIX Los restos del 'Don Juan' en Tarifa y la vida que alberga Miguel Fernández / Manuel PérezHay constancia de que en este pecio se hallaron diversos elementos «pero desgraciadamente no sabemos dónde se encuentran» porque « ha sido muy expoliado entre los años 70 y 80 », se lamenta la jefa del CAS de Cádiz. Se localizaron lingotes de plomo de la fundición de San Andrés de Adra (Almería), que tenían su nombre grabado y llevaron a bautizarlo así. También se sabe que se extrajeron botellas de vidrio de la compañía Schweppes «de las que únicamente hemos podido ver fotografías», relata Alzaga. Según la información que la propia empresa proporcionó a la investigadora para un informe que publicó en 1998, estas botellas de vidrio con base curvada sustituyeron a las primitivas Schweppes de barro y fueron diseñadas en 1809 por William H. Hamilton. Por ese motivo se les llamó 'Hamilton' aunque eran más conocidas como ' botellas torpedo ' porque fueron diseñadas para ser colocadas en posición horizontal de modo que el corcho se mantenía saturado y expandido, reteniendo así la carbonatación. Por su base curva, que les impedía mantenerse en pie en una superficie lisa también se les denominó botellas 'borrachas '. «En el caso del 'Don Juan' se supone que fueron estibadas a bordo como consumo del pasaje y de la oficialidad al mando del vapor», indica Alzaga.Una requisa reveladoraEn una requisa de la Guardia Civil a buceadores de la zona se recuperó un fragmento de un plato de loza que curiosamente fue el que permitió identificar el pecio. En la cerámica se veía parte de un sello con unos motivos de temática naval -una bandera, un buque de navegación híbrida a vapor y velas, dos columnas y una torre- enmarcados en una leyenda en inglés de una compañía naviera. Solo se leía: «...igation company». Con estas pistas, el CAS realizó una búsqueda documental en 2013, en el marco de desarrollo del Proyecto Carta Arqueológica Subacuática, que identificó el emblema de la naviera Peninsular Steam Navigation Company , que sigue prestando servicio marítimo en la actualidad.«El vapor 'Don Juan' fue uno de los primeros buques de vapor en navegar a principios del siglo XIX Milagros Alzaga Jefa del Centro de Arqueología Subacuática de CádizLas dos columnas aludían a las de Hércules y se relacionaban con la ruta emblemática de la compañía entre Inglaterra y Gibraltar, mientras que el buque híbrido a vapor y velas del dibujo no era otro que el 'Don Juan'. Inició su viaje inaugural el 20 de julio de 1837 con destino al Peñón y el 1 de septiembre de ese mismo año se convirtió en 'vela correo', dedicándose desde entonces mayoritariamente al servicio postal marítimo. De 45 metros de eslora y 7 de manga, podía alcanzar una velocidad de 7 nudos y transportar hasta 24 pasajeros. «El vapor 'Don Juan' fue uno de los primeros buques de vapor en navegar a principios del siglo XIX», resalta la jefa del Centro de Arqueología Subacuática. De ahí que la investigación de este pecio haya aportado información sobre la transición de la navegación de los buques de vela a vapor en la que Inglaterra fue pionera, así como datos sobre la comunicación continua que mantenía con su plaza de Gibraltar, una posición estratégica muy importante.Noticias Relacionadas estandar Si Lauro Olmo Arqueólogos en su paraíso (IV): La Ciudad Brillante de Abderramán III Mónica Arrizabalaga estandar Si Arqueólogos en su paraíso (II) La Bastida de Moixent, una ciudad ibérica del IV a.C. en su esplendor Mónica Arrizabalaga estandar No Arqueólogos en su paraíso (III) «En Itálica no se necesita mucha imaginación para soñar cómo fue esa gran ciudad romana» Mónica Arrizabalaga estandar Si Arqueólogos en su paraíso (I): «Atapuerca es mi yacimiento fetén» Mónica ArrizabalagaLa documentalista Lourdes Márquez encontró dos referencias sobre su naufragio en la prensa de la época . «Por fortuna fue visto por el paquete de vapor del gobierno, Medea, y con gran prontitud acudió a su socorro, logrando salvar la tripulación, los pasajeros con sus equipajes, 21.400 ps fs. en metálico y parte de los muebles del buque, cuando deshaciéndose se fue a pique enteramente», contó la revista 'El Instructor' y 'La Gaceta de Madrid' añadió: «El capitán ha permanecido en el buque hasta las ocho de la mañana del siguiente día, en cuyo momento se fue a pique».
Publicado el 25-08-2024 16:52
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